Del 2014 a la fecha la percepción de la ciudadanía respecto a la inseguridad sigue siendo la misma señaló la presidenta del observatorio ciudadano de Morelia, Iskra Tapia tras presentar al alcalde de Morelia, Salvador Abud Mirabent los resultados de una encuesta aplicada a una muestra de 600 personas mayores de 18 años de 120 colonias de la capital michoacana de julio de este año a la primera semana del mes de agosto.
De acuerdo al estudio de percepción sobre seguridad y victimización en la ciudad de Morelia, PERSEVIM, la mayoría de los encuestados aseguró que su calidad de vida sigue siendo la misma debido a que las condiciones de seguridad no han mejorado.
El estudio arrojó que debido a la percepción de inseguridad las personas han dejado de portar joyas, tarjetas de crédito y dinero en efectivo por temor a ser asaltados, situación que se colocó a la cabeza como los principales problemas de inseguridad junto con los con los robos con 36 y 26.7 por ciento respectivamente.
Los ciudadanos aseguraron en un 42 por ciento que las principales causas de la delincuencia en Morelia son el desempleo, cifra que se incrementó en un 27 por ciento respecto al estudio de percepción realizado en el 2014, en segundo lugar colocaron la mala educación, en tercero el narcotráfico y en último lugar a la deficiencia del gobierno.
De acuerdo a los encuestados el 48 por ciento se siente seguro en casa, y en segundo lugar en centros comerciales pero no en las sucursales bancarias.
De los delitos que son víctimas, un 54 por ciento de la población reveló que no denuncia debido a la poca confianza que tienen en las instituciones de seguridad, esta cifra se relaciona a la arrojada tras preguntárseles si usan los números de emergencia, de lo cual el 67 por ciento negó hacer uso de este servicio y del 32 por ciento que si lo hace, el 56 por ciento aseguró que la ayuda nunca llega, el 34 por ciento dijo que tardan alrededor de 46 minutos y un 11 por ciento refirió que la respuesta de las autoridades es de alrededor de 29 minutos.
De igual forma una gran mayoría aseguró haber sido víctima de algún soborno principalmente por los agentes de tránsito, seguido de la Policía Estatal, Policía municipal, Policía ciudadana, federal y después el ayuntamiento
De los encuestados el 60 por ciento aseguró que la ciudadanía ha comenzado a organizarse para combatir el delito, cifra que creció según Iskra Tapia en un 4 por ciento respecto al 2014.
