Durante el ùltimo evento que protagonizaron los normalistas para conmemorar un año de la desaparición de los estudiantes de Ayotzinapa, Guerrero en el que robaron algunos autobuses para llevar a cabo sus manifestaciones, al menos uno de ellos de la empesa Parhíkuni fue vandalizado por los normalistas de Tiripetío al llevarse las memorias y tratar de robar las pantallas de la unidad, daños que ascienden aproximadamente a 250 mil pesos que el dueño del camión tendrá que pagar.
Así lo manifestó Arcadio Méndez Hurtado, Presidente del Consejo Cordinador Empresarial del Estado de Michoacán (CCEM) y delegado de la Cámara Nacional de Autotransporte de Pasaje y Turismo (CANAPAT) quien lamentó que nuevamente se lleven a cabo acciones de vandalismo y robo de autobuses sin que haya sanción alguna a pesar de que el delito se encontraba en flagrancia.
El delegado dijo que los empresarios ya han tenido acercamiento con personas que iniciarán en la nueva administración en unos días quienes se comprometieron a aplicar la ley y no permitir más el robo de autobuses por parte de normalistas o cualquier otro grupo ante lo cual, la CANAPAT se comprometió a nuevamente presentar las denuncias correspondientes que había evitado entregar, con la esperanza de que en la Procuraduría General de Justicia del Estado (PGJE) no se queden nuevamente archivadas.
Méndez Hurtado dijo que ahora esperan el dos de octubre para ver lo que puedan hacer los normalistas cuando se trasladen a la Ciudad de México a su manifestación aunque mostró confianza en que no pase a mayores debido a que ya la autoridad está actuando para quitarles las unidades «pero nosotros no solo queremos que les quiten las unidades, sino que sean presentados ante las autoridades judiciales para que se les sancione.
Agregó que tienen confianza en que ya no haya más acciones negativas que han dañado no solamente a los transportistas a los que representa, sino al estado de Michoacán que ya no puede soportar más acciones vandálicas de los muchachos que deberían estar en las aulas aprendiendo y ejemplificó que «su forma de calificación es que a quien más actos vandálicos cometa, tiene mejor promedio, si un muchacho quema la puerta de Palacio de Gobierno, le ponen un diez de calificación, es urgente que se terminen esas prácticas».
Por último, el empresario destacò que anteriormente los normalistas les pedían las unidades «casi prestadas» ya que el Gobierno del Estado pagaba un 50 por ciento del costo, la empresa pagaba el 25 por ciento y los normalistas pagaban otro 25 por ciento pero eso se perdió cuando comenzaron a robarse las unidades de manera agresiva ante la falta de autoridad aunque ahora, tiene la esperanza de que todo cambie, que los empresarios pondrán de nuevo la denuncia y que la policía estatal y federal reaccione ante el inicio de este nuevo gobierno.
